Los dos turistas británicos que cayeron al mar desde un crucero en Getxo salen de la UCI, y su rescatador recibe la felicitación de la naviera.
Los dos ciudadanos británicos que el pasado miércoles cayeron a las gélidas aguas del muelle de cruceros de Getxo salieron ayer de la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del hospital de Cruces y fueron trasladados a planta. Los dos turistas -un varón de 63 años y una mujer de 76- mejoran de sus lesiones y del principio de hipotermia que padecieron. Entretanto, el joven filipino que se lanzó al agua para rescatar a la pareja después de que la escala de acceso al buque cediera por el fuerte viento cosechó ayer los elogios y la admiración de parte del pasaje y de la propia naviera.
«Ha actuado como un héroe», celebró una portavoz de la compañía Fred Olsen en Londres, que se excusó, sin embargo, por no poder ofrecer más detalles sobre el tripulante. «No estamos autorizados para hablar de este asunto», dijo. Cuando le atendió poco después del accidente, la DYA le identificó con las iniciales A. R., de 45 años. El valiente marinero volvió al 'Black Watch', que ayer arribó al puerto francés de La Rochelle.
Los británicos ingresados en Cruces pasaron la noche junto a sus respectivos cónyuges y varios familiares más que se han desplazado al centro médico. También se personaron dos miembros de la tripulación del 'Black Watch', responsables de las empresas aseguradoras y de la consignataria, así como un intérprete.
No habrá investigación
De los dos heridos, la mujer es la que peor pronóstico presenta. Al parecer, tragó bastante agua y sus pulmones están encharcados. No obstante, evoluciona de forma favorable. Por otro lado, fuentes de la Autoridad Portuaria adelantaron ayer que no se abrirá una investigación sobre el accidente. «Parece claro que la escala del crucero se movió por la incidencia de un golpe de viento muy fuerte», declaró un portavoz. «Todo apunta a que no fue una negligencia», apostilló.
