Tras casi cuatro de construcción, en el dia de hoy ha arribado al puerto de Las Palmas elmayor yate del mundo el ECLIPSE, construido en el astillero Blohm & Voss (Hamburgo, Alemania), el yate privado más grande del mundo. Un yate que ha sido construido deliberadamente para simbolizar, aún más si cabe, el estatus del oligarca ruso Roman Abramovich.
Las dimensiones del yate Eclipse son absolutamente descomunales. Tiene 170 metros de eslora, lo que lo convierte en el yate mas grande del mundo, superando las dimensiones del que hasta ahora poseía tal record. Un yate de 160 metros que pertenece a Sheikh Mohammed bin Rashid Al Maktoum (primer ministro de los Emiratos Árabes Unidos y mandatario del emirato de Dubai).
El yate dispone de alojamiento para 62 invitados y 50 miembros de la tripulación, tiene dos helipuertos, una lujoso SPA y hasta una pequeño submarino que puede servir como vía de escape ante cualquier problema. Para mantener la máxima seguridad del oligarca la Master Suite de Abramovich tiene un blindaje especial así como ventanas a prueba de balas. Por si esto no fuera suficiente el yate es el primero del mundo que incorpora un sistema de detección de misiles.
Abramovich es el orgulloso propietario de una flota de cuatro yates de lujo al que se une el Eclipse; Pelorus (114 metros), Ecstasea (85 metros) y Sussurro (49 metros). Sólo los gastos de estos yates le suponen alrededor de 16 millones de Euros anuales. Como curiosidad llenar los tanques del Eclipse tiene un coste de alrededor de 79.000 Euros.
Roman Abramovich (42 años) es uno de los hombres más ricos del mundo según Forbes, aunque ya no es el hombre más rico de Rusia, pues su compatriota Mikhail Prokhorov le ha desplazado de tal honor.
Sólo las modificaciones para instalar el sistema antimisiles supieron un incremento de 327 millones de Euros. El coste del Eclipse se estima en alrededor de 800 millones de Euros.
El megayate cargó ayer tarde 290.000 litros de gasoil, varios cientos de kilos de alimentos y embarcó a 18 nuevos tripulantes que habían llegado a la isla en avión, entre ellos ocho mallorquines que tienen que realizar reparaciones a bordo. El Eclipse, que llegaba desde Noruega, viaja hasta el Caribe con 60 tripulantes aunque hay cabida para 80.
El barco, cuya tripulación va uniformada como el servicio de una terraza chill out, atracó a ritmo de música dance en sus cubiertas, música que seguramente procedía de la discoteca que hay a bordo, uno más de los caprichos de Abramovich.
Bajo fuertes medidas de seguridad, no se permitió el acceso a bordo a nadie ajeno a la tripulación, Eclipse zarpó anoche rumbo al Caribe donde el magnate ruso y sus invitados podrán disfrutar, además de la discoteca, de las dos piscinas, los dos helipuertos, un cine privado, un muelle flotante o darse un viaje a las profundidades con el minisubmarino que incorpora en sus bodegas. Con tantas excentricidades, el barco más parece copiado de una película de James Bond que otra cosa.
